El desafío que representa educar a los hijos es, sin duda, el mayor de nuestras vidas como padres. En el camino surgen interrogantes como ¿debo ser permisivo o autoritario?, ¿está bien aplicar castigos?, ¿qué es la crianza positiva? Aquí te contaremos todo sobre cómo aplicar una crianza positiva con tus hijos para que se conviertan en adultos emocionalmente estables.
¿Qué es la crianza positiva?
La crianza positiva se trata de criar y educar a nuestros hijos e hijas de manera respetuosa, reconociendo sus derechos y dignidad como personas individuales. UNICEF señala que son aquellas prácticas de cuidado, protección, formación y guía que fomentan su desarrollo saludable tanto físico como mental.
Lo cierto es que muchas veces este proceso se ve opacado por los modos de crianza bajo los que hemos crecido. Antes, era habitual que nuestros padres y abuelos corrijan actitudes negativas recurriendo a la violencia física o verbal. Un jalón de orejas, una nalgada, pellizcos, gritos, amenazas, eran prácticas habituales para “educar” al niño.
Hoy, es importante entender que, bajo los Derechos del Niño que lo amparan, no se debe recurrir a cualquier tipo de violencia para la crianza y educación del menor. Los beneficios de la crianza positiva harán de tu hijo un niño feliz y sano emocionalmente.
¿Qué busca promover la crianza positiva?
Lo que se busca con la crianza positiva es fomentar a que el niño tenga cierta independencia y pueda participar tomando algunas decisiones. Pero no nos confundamos, es el adulto quien sigue estando a cargo. No obstante, decide alejarse totalmente del castigo (físico y/o verbal) y la permisividad.
El aspecto principal de la crianza positiva se ubica en el punto medio entre ser autoritario y condescendiente. No se trata de imponer y aplicar el castigo si no se cumplen las normas, ni de dejar al niño hacer lo que quiera. Se trata de conversar más tomando en cuenta los sentimientos y emociones del niño. Sobre todo, con un trato siempre amoroso y aprendiendo a ser pacientes.
¿Cuál es la mejor forma de crianza para los niños y niñas?
Basados en una crianza positiva, toma en cuenta estas premisas para educar y criar a tus hijos:
- Una nalgada o cualquier acto de violencia física no sirve para educar. Por el contrario, volverá violento al niño y entenderá que está bien hacerlo. En la adultez podría desencadenar problemas más severos de agresión.
- Si recurres a los gritos, solo lograrás asustar al niño, más no corregirlo.
- Aprende a dialogar con tu hijo y explícale de manera calmada y paciente qué está haciendo mal.
- Construyan normas juntos y aplícalas cuando se presente el momento.
- Si te equivocas, pide perdón. Así le enseñas que errar es de humanos y que lo puede reparar.
- Demuéstrale afecto y amor así no te lo pidan. Todos los niños lo necesitan, además de comprensión y respeto.
Crianza positiva frente a un berrinche
¿Quieres saber cómo lidiar frente a un mal comportamiento? Toma nota de estos consejos:
- Intenta entender qué puede haber causado la mala actitud.
- Dile que “no” con firmeza y amabilidad, pero valida lo que está sintiendo. Por ejemplo: » Veo que estás ansioso. Juguemos.”
- La típica escena del supermercado en donde el niño quiere algo y los padres no van a comprárselo. Puedes decir “Veo que estás ansioso por comerte esa galleta. Se ve rica. ¿Pero qué tal si elegimos un refrigerio más saludable?». Aprende a negociar con ellos de manera saludable.
Es importante entender que los niños no se portan mal solo porque sí o porque quieren avergonzar a sus papás. Es la manera que ellos tienen de comunicar que algo no anda bien, puesto que no manejan sus emociones como lo haría un adulto.
Mitos y verdades sobre la crianza
Es momento de derribar aquellas expresiones que han acompañado a la crianza durante años. ¿Te sentirás identificado/a con alguna?
Mito: Con una nalgada se soluciona el problema
Realidad: Como adultos responsables de un niño, es nuestro deber preservar sus derechos y respetar sus necesidades. Una nalgada no responde a una necesidad, más bien podría ser la manera en cómo el adulto intenta detener la mala conducta.
Mito: Una cosa es golpear al extremo y sin sentido y otra dar un golpe como correctivo.
Realidad: Ambas acciones son lo mismo. Para ser más claros: violación de los Derechos del Niño.
Mito: Ahora ya no se les puede tocar, ni regañar, ni decir nada cuando se portan mal porque ahí mismo se habla de los Derechos del Niño.
Realidad: Lo cierto es que los Derechos del Niño no prohíben la interacción, ni el diálogo, ni la guía. Se trata más bien de una crianza positiva.
En colegios Pamer educamos a nuestros alumnos bajo el respeto, cordialidad y la calidez que nuestros profesores les brindan. Siempre en espacios de paz, seguridad y confianza, condiciones necesarias para que se activen los circuitos del cerebro que facilitan el aprendizaje.
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