Muchas veces como estudiante caes en hábitos que no te ayudan a potenciar al máximo tu educación y es tu tarea cambiarlo por otros que te impulsen a conectarte a un mundo de éxito. Alguna vez te has preguntado:
¿Estoy realizando hábitos adecuados para mi ingreso?
Responder esta pregunta te ayudará a identificar si los hábitos que tenemos lograrán alcanzar tu ingreso asegurando una vacante. Identifiquemos y mejoremos juntos estos hábitos, pero antes de eso, tenemos que saber…
¿Qué es un hábito?
“El hábito es el resultado de una acción que repetimos frecuentemente”.
Estas acciones se vuelven parte de tu día a día, algunas acciones pueden ser correctas y no tan correctas, pero al fin y a cabo, son acciones inconscientes que se dan a diario como cepillarse los dientes luego de cada comida, lavarse las manos frecuentemente. También existen hábitos negativos y hasta en el tema de estudios también las tenemos. Los positivos son como el de tener tu horario de estudio, tomar siempre apuntes, subrayar, diferenciar los temas por colores, entre muchas más, pero los preocupantes son los negativos que pueden poner en riesgo a mediano plazo el poder llegar a la meta de lograr tu ingreso a la universidad de tus sueños.
Los hábitos negativos son los más comunes que debemos corregir para asegurar tu ingreso
Estas acciones son desfavorables y serán piedras en tu camino hacia tu ingreso. Es casi seguro que muchos lo tienen y sin darse cuenta lo seguimos realizando, como por ejemplo:
- La impuntualidad: Hábito que muchas veces incluso se da fuera del tema educativo, esto puede ocasionar que muchas veces puedas perder “las fijas” de exámenes de admisión pasados que el profesor puede soltar. Si hacemos las cuentas por cada 5 minutos que llegues tarde a las clases al final de unas semanas puedes perder hasta más de 1 hora.
- La postergación: Dejar la tarea a última hora o repasar el tema minutos antes de cada clase es un mal hábito que puede que se sigas arrastrando desde el cole y si no se corrige seguirás haciéndolo en la universidad. No te des por vencido, es un mal hábito renunciar a los estudios en curso por el solo hecho de perderte algún tema.
- El desinterés: Cuando no pones energía al momento de aprender no estarás enfocado y te será más difícil prepararte. Saca de tu cabeza las típicas frases como “No entiendo”, “Ya volé” o “mejor refuerzo aquello que sí sé”. Lo ideal es ser constante y no abandonar tu preparación, busca nuevas estrategias y automotívate, el camino hacia tu ingreso es exigente, pero es el camino seguro hacia tu objetivo: TU VACANTE.
- Mala alimentación: La alimentación saludable es básica, pero es un hábito que no todos tenemos. Por eso es importante para mantenerte activo con buena atención y concentración. Algunos alumnos se privan los alimentos con la idea de estudiar mas de lo esperado, pero NO SE TRATA DE ESO, comer sano y en el tiempo correcto te mantiene con vitalidad para hacer más eficiente tu tiempo.
- No repasar fuera de mi horario de estudio: Conformarte con lo aprendido solo en clase te llevará a la falta de información en las materias, no te quedes atrás, refuerza tu aprendizaje luego de clases y no te quedes con lo que estudiaste solo en clases.
- Desorganización: El no poder organizar tu tiempo y espacio para reforzar tu aprendizaje te atrasará con todo lo pendiente que tienes por estudiar. Sin una organización estudiarás lo primero que encuentres y cuando te des cuenta estarás más descuidado en algún curso.
- No priorizar: ¡Las fiestas, amigos, jugar a la pelota o el enamorado pueden esperar! Es importante ser disciplinado y mentalizarse para lograr tu objetivo. Si no organizas tu tiempo no lograrás obtener una vacante. Recuerda que este sacrificio es por un tiempo hasta que logres alcanzar tu meta, primero decide estudiar sin renunciar para que luego puedas disfrutar. Una vez cumplida la meta tendrás tiempo de sobra para dichas actividades, no olvides que como tú hay miles de jóvenes que tienen el mismo enfoque de alcanzar la gloria de pertenecer a la universidad de sus sueños.
Hoy en día con la virtualidad presente también han llegado algunos malos hábitos que son:
- Usar tu teléfono para surfear en las redes mientras estás en clases.
- Excusarte por falsas tardanzas, faltas o no participación.
- No preguntar y quedarte callado cuando hay dudas sobre el tema.
- Ingresar tarde a clases aun cuando estás en casa de manera virtual.
- No tomar nota de las clases porque puedes tomar foto a lo enseñando.
- Entrar a clases con pijamas; inicia tu día con más energía cambiándote de ropa.
Te mostramos algunas consecuencias que generan los malos hábitos
Falta de concentración, falta de atención, desmotivación y en algunos casos dolores físicos. Pero lo más crítico sería retrasar tu proceso de aprendizaje. Llevándote a la consecuencia de NO ALCANZAR LA VACANTE. Por ello, si transformas tus hábitos de negativos a positivos tendrás mejores resultados. Así que trabaja en ello, como los cursos con mayor dificultad, repasando todos los cursos no los que solo te gustan, organizando tu día cada mañana y dándote a ti mismo palabras de aliento.
Pero… ¿Cómo cambio mis hábitos?
- Primero reconoce el mal hábito y crea un plan para cambiarlo.
- Si es muy fuerte pide ayuda a alguien, el cambiar esta acción requiere de mucha fuerza de voluntad y a veces en necesario un poco de ayuda. Por eso, en Pamer contamos con tutores especialistas que te guiarán en tu camino a un mundo de éxito.
- Reemplaza lo malo por lo bueno, por ejemplo, si estudiabas en tu cama ahora acomódate en tu escritorio o tu espacio de estudio, corrige ese mal hábito. Poco a poco ganarás más fuerza de voluntad, y si no puedes solo, pide ayuda de un familiar que te haga recordar cada vez que quieras volver a hacerlo.
- Busca personas que estén comprometidas a ayudarte a prepararte en tu objetivo. Puede ser tu hermano, mamá o un buen amigo, ellos podrán ver lo que te perjudica en tu camino. En Pamer contarás con alternativas como tus tutores que serán guías en tu preparación.
Y para el modo virtual también tenemos algunas correcciones a los malos hábitos
- Verifica que tu cel esté con batería suficiente.
- Conéctate desde un solo dispositivo para no crear distracciones.
- Entra 5 minutos antes a la clase para conocer datos importantes.
- Mantén tu espacio de estudio limpio, organizado, iluminado y bien ventilado, eso te transmitirá la motivación y energía correcta.
- Contar con los materiales necesarios en tus horas extras de estudio.
Soltando toda esta información es momento de preguntarte: Y tú, ¿Qué harás desde hoy?
¡Recuerda! Un hábito poco saludable trae consecuencias negativas a la salud física, mental, emocional y social.